Hoy os vamos a hablar de una taberna madrileña, nada mejor para comenzar la nueva temporada lunática, como algo típico de nuestra ciudad: las tabernas.
Aunque esta taberna es relativamente nueva, ya que se abrió en el año 2000, se integra perfectamente en el Madrid castizo como podéis apreciar en la siguiente foto.
Destacar en primer lugar su localización, La Tosta se encuentra situada en pleno centro de Madrid, en una de las calles del barrio de Huertas cerca de la Puerta del Sol, concretamente, en la calle victoria, nº8.
La Tosta se caracteriza, como su nombre indica, por la variedad de tostas que ofrecen en su carta. Antes de entrar en la puerta ya te muestran en unas pizarras la variedad de tostas que tienen, así como las diferentes raciones y sus precios para que te hagas una idea de lo que puedes encontrar dentro.
La Tosta se caracteriza, como su nombre indica, por la variedad de tostas que ofrecen en su carta. Antes de entrar en la puerta ya te muestran en unas pizarras la variedad de tostas que tienen, así como las diferentes raciones y sus precios para que te hagas una idea de lo que puedes encontrar dentro.
Como podéis observar en la foto de la carta se puede elegir desde la típica tosta de salmón ahumado hasta la tosta de solomillo de buey braseado sobre mermelada de cebolla al gratén de salsa bearnesa todas ellas elaboradas sobre un pan exquisito. Pero si queréis alguna recomendación, os animamos a que probéis la de champiñones salteados al gratén de ali-oli de frambuesa o la de solomillo ibérico sobre salsa de frutos rojos. Pero cualquiera de ellas están deliciosas.
Su tamaño, como podéis observar, es bastante grande y su precio muy adecuado a su calidad y tamaño.
De las raciones,que también ofrecen una muy buena calidad, queremos destacar las croquetas. Aquí os mostramos su carta de tapas y ensaladas.
Pero si lo que quieres es simplemente tomarte el aperitivo, también es el lugar indicado. Ya que acompañando a tu consumición te ponen unas tapas exquisitas.
Una de las cosas que más llaman la atención al entrar en la Tosta es la gran cantidad de jarras de sangría que tienen puestas en la barra. Bebida, por cierto, muy típica en nuestro país, pero difícil de encontrar en muchos bares. Esa es otra de las características que nos gustaría destacar de esta taberna, que tienen sangría y que además está buenísima. Se puede pedir en jarra o una copa individual.
El local se compone de tres zonas, por así decirlo, nada más entrar encontramos la barra, siempre llena de gente, en un ambiente distendido y agradable, ideal para tomar un aperitivo e incluso cenar. Si continuamos el pasillo hacia el baño, encontramos dos pequeños salones con varias mesas, para comer o cenar o tomar una caña tranquilamente. Bajando las escaleras hay un pequeño sótano-bodega, llamada la Cueva de la Tosta, una sala íntima muy adecuada para celebraciones o eventos o como zona de copas. Esta cueva se puede reservar gratis para grupos siempre y cuando se consuma.
Destacar por último, y no menos importante, el trato que recibes en esta taberna por parte de los trabajadores y del propio dueño. Nada más entrar te reciben con un saludo y una sonrisa y están continuamente pendientes de que no te falte de nada. Un ambiente cómodo y familiar con un servicio incomparable.
Un bar ideal para tapear, para quedar con los amigos/as de siempre, para celebraciones, para ir con la pareja o para comer o cenar de manera informal. Un lugar acogedor,muy bien situado, donde recibes un trato muy muy agradable y donde degustarás una comida deliciosa, y una sangría que no puedes dejar de probar.
Esperamos que os guste.
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